tarjeta de crédito

Aprende todo sobre tarjetas de crédito

 

Si vas a empezar a utilizar tarjetas de crédito es necesario que conozcas cómo funcionan. Evita poner en riesgo tus finanzas.

 Lo que hay que saber antes de empezar

Mucha gente cree que las tarjetas de crédito están ahí únicamente para tapar un hueco en sus finanzas, por ejemplo, hasta que le paguen o para saldar facturas.

Aunque algunas personas se encuentran utilizando una tarjeta de crédito sólo por esas razones, ésta no es la mejor manera de utilizarla.

Si tienes dificultades para pagar las facturas y tienes que cargar parte de tu vida a crédito cada mes, corres el riesgo de caer en una deuda más permanente.

Mujer revisando tarjeta de crédito

Si tú eres una de esas personas, probablemente no sea una buena opción depender de las tarjetas de crédito, sino que debes analizar tus gastos y tu presupuesto.

Si vas a utilizarlas con regularidad, las tarjetas de crédito deben servir para sacar el máximo partido a tu dinero.

Puedes utilizarlas para repartir el costo de una gran compra, como unas vacaciones o el mobiliario de la casa, a lo largo de un periodo de tiempo.

También puedes utilizarlas para saldar deudas por menos dinero, con una tarjeta de transferencia de saldo barata.

Y puedes utilizarlas para obtener recompensas, con las que ganarás puntos por tus gastos. Sólo tienes que acordarte de pagar la factura a tiempo y en su totalidad.

Si gastas mucho dinero en vuelos, por ejemplo, o quieres hacer una gran compra, una tarjeta de crédito puede ayudarte a acumular recompensas por tus gastos. Hay cientos de tarjetas entre las que elegir. Pero elegir una que no sea buena puede suponer un mal negocio. Y si no sabes utilizarla correctamente -o no sigues las reglas- es fácil que empieces a acumular deudas y que tu calificación crediticia se resienta. Así que presta mucha atención para encontrar la adecuada.

 Cómo funcionan las tarjetas de crédito

Una tarjeta de crédito te permite pedir prestado y gastar hasta un límite acordado. Por lo general, se te cobran intereses por ese préstamo hasta que se liquide el saldo.

El límite de gasto -o de crédito- lo decide el proveedor. Dependerá de tus circunstancias individuales, teniendo en cuenta factores como los ingresos y el historial crediticio.

El interés que pagues también se acordará antes de que contrates oficialmente tu tarjeta de crédito.

Hay un par de tipos diferentes que debes conocer con tu tarjeta de crédito.

El tipo estándar de la tarjeta es el interés que pagarías fuera de cualquier oferta especial si gastas en ella, por ejemplo, el 16,9%. Los proveedores de tarjetas de crédito deben dar una cifra representativa de la TAE que tenga en cuenta este tipo y los gastos habituales.

También hay ofertas especiales, normalmente para compras o transferencias de saldo, o para ambas cosas. Pueden ser del 0 por ciento durante un periodo limitado; comprueba siempre la letra pequeña de estas ofertas.

Mujer revisando tarjeta de crédito

Los tipos de interés estándar para los gastos pueden variar enormemente, desde alrededor del 7 por ciento, si tienes una buena calificación crediticia, hasta el 50 por ciento para quienes tienen un mal historial financiero.

El tipo que te ofrezcan dependerá también de tu perfil crediticio. Recuerda que puede no ser el tipo de interés que ves anunciado. Los proveedores sólo tienen que ofrecer la mejor oferta al 51% de los solicitantes seleccionados. Muchas personas se darán cuenta de que el tipo que se les ofrece es mucho más alto.

Cada mes se te enviará una factura detallada de todo lo que has gastado con la tarjeta. La mayoría de las tarjetas tienen un periodo de gracia de un mes, más o menos, tras la emisión de la primera factura, antes de que se cobren los intereses.

También te puede interesar: Cómo administrar tu tarjeta de crédito

Más sobre créditos, préstamos e información financiera en toadstoolbooks.com